SÁBADO

Disfrutar de la tranquilidad de una mañana fresquita,
del inicio de un día sereno y apacible de momento,
y con espectativas de que así sea.
Una especie de emoción,
por la efímera relajación.
Una persona con un boli en la mano,
escribiendo letras que de repente le han inspirado.
Ni buenas ni malas,
ni caras in baratas.
Sentimiento, pensamientos,
escritos antes de que acabe esto.
Porque acaba,
porque siempre pasa.
Aprovechar el momento
es un gran consejo.
Saborear el silencio,
labrando un comienzo.
Acariciar levemente el aire,
mientras en él no se meta nadie.
Bajar la guardia mientras puedas,
porque es un regalo que no siempre llega.

¡ Y PUNTO!

Vive el presente,
no te lo inventes.
No vivas en sueños,
vive tu realidad.
No juegues con cuentos,
camina en tu historia.
No imagines las cosas,
siéntelas, vívelas.
Nada es un camino de rosas,
pero no te puedes quejar.
Por muy mal que todo te vaya,
por mucho que te desmorones,
piensa que tienes suerte,
que a pesar de todo,
las cosas podrían ir peor.
Siéntete a gusto contigo misma,
acéptate tal cual eres,
porque eres para toda la vida,
porque tú eres la primera que quererte debes.
No pases el tiempo imaginando cómo sería,
no pierdas esos momentos, no malgastes tu vida.

En el cajón de los dolores
hay un montón de cajones,
en cada uno hay más y más,
un sin fin por acabar.
En el fondo del todo,
donde se esconden los secretos,
hay un pequeño recodo,
ansioso por nuevos retos.
Pide a gritos un respiro,
vive a base de largos suspiros.
Que tiene esperanzas,
que tiene ilusiones,
que apenas alcanza
el aire en sus pulmones.
Deseos, anhelos,
sueños, aspiraciones.
Piensa en lo bueno que tienes,
recuerda la suerte que tienes.
Porque no vale la pena el tiempo malgastar,
porque el sufrimiento tú debes intentar parar.

POLÍTICAMENTE CORRECTA

Tranquila, no te exaltes,
no hables, no escuches,
no mires, ignora.
No contestes,
estate ausente,
haz oidos sordos.
Muérdete la lengua,
no digas nada,
ni para bien ni para mal.
Es por tu bien,
por el bien de todos.
Que no haya broncas,
que no haya encontronazos.
Calla, aunque te cueste,
no respondas ante provocaciones.
A los comentarios con segundas intenciones,
haz oidos sordos.
Calma, sosiego.
Que no pase nada.
Porque luego,
aunque no sea cierto,
te echan la culpa.
Todos queremos hacer lo mismo que tú quieres,
pero sabes que no podemos.
Todos nos jodemos,
lo sentimos, pero es así.

Y yo quieta, y yo callada,
y mirando a otro lado,
intentando hacer oidos sordos,
mordiéndome la lengua,
ausente en mí misma, a veces.
Como un niño en una esquina,
castigada en un rincón.

No te rebajes a su altura,
sé fuerte pero no dura.

Y así, responsable y obediente,
con boca cerrada, casi apretando dientes.
Una tarde, varias horas, se convirtieron años,
eso sí, siempre guardando las formas.

Y después, hasta la próxima.

UN MAL DÍA

Hay días en que no te apetece hacer nada,
en que el mundo va al revés.
O eres tú la que mal te mueves.
En que todo te sale mal,
y parece que vas a reventar.
Hay mañanas en las que te levantas cansada,
y una especie de presentimiento te llama.

Por la tarde, tus sospechas se confirman,
el día ha sido una pifia.

Por la noche entiendes que,
aunque crees que tu día a día podría ser mejor,
nunca equiparan a los que son mil veces peor.

Un día como estos,
tan malo,
hace tiempo no lo has tenido,
con todo acumulado.

Antes de acostarte,
te sientas en la cama y,
mirando a la nada,
temes el mañana levantarte.

Qué mala suerte.
Pero la fortuna no es precisamente mi fuerte.

Una angustia que te reconcome,
que te duele, que de los nervios te pone.

Y es que hay días,
que es mejor no levantarse de la cama.

LA BELLEZA DE LA VIDA

Simples cosas, sutilezas.
Una mirada, una sonrisa,
un simple beso.
Sentir el viento en la cara,
escalofríos en la espalda.
El amor de los tuyos,
respirar aire puro.
Tararear una canción todo el día,
encontrarte con alguien que la silba.
Reir descontroladamente por una tontería,
llorar de alegría.
Echar la vista atrás añorando viejos tiempos,
esperar ansiosa nuevos retos.
Una llamada inesperada,
una noticia grata.
Oír fuegos artificiales,
a cuatro o cinco calles.
Ilusionarte por lo nuevo,
agradecer todo lo bueno.
Hacer lo que te gusta.
Recibir y dar cariño,
enamorarse como un niño.
Llover y no tener paraguas,
llegar empapada a casa.
Estar sedienta y beber agua,
ver el sol al alba.
Acabar un libro apasionante,
escribir el propio después o antes.
Oler la comida recién hecha de mamá,
dormir raro y caerte de la cama.
Reencontrarte con quien creías olvidada,
un franco abrazo a la luz de la mañana.
Nervios entre palabras,
sinceridad en las miradas.
Sorprender y ser sorprendida.
Sentir los latidos del corazón,
tener la piel de gallina.
El brillo de unos ojos inundados
de emoción y alegría.
Apreciar más el valor sentimental,
que de algo material.
Apostar por lo que uno quiere,
si vale de verdad.
Cosas grandes o pequeñas,
duraderas o efímeras.
Pero tantas...

MAR ( 5 de Septiembre)

Dulce abrazo, un río salado,
la luz de un día fresco y calmado.
La base de un cuadro arropando los trazos.
Apoyo y refuerzo.

Nostalgia de un pasado,
con el tiempo medio olvidado.
Soñar con cuentos de hadas,
escritos por verdades deseadas.
Una flor naciendo en mitad de un torbellino de agua.

Cuando el viento arrastre lejos todo mal,
todo el que se pueda curar,
el cuento de hadas no se hará realidad,
pero nuestros corazones rebosarán felicidad.

La libertad es un derecho,
poder desplegar las alas y echar a volar sin techos.
Y si la vida nos lo impide,
habrá que buscar otro hueco,
pues la mente es libre,
y los corazones repletos.

Tirar las jaulas,
romper barrotes,
para flotar al mundo de la propia libertad,
estando vivas, con ganas de luchar.

Si te dicen que logré,
algo bueno en mi vida,
ten por seguro que por tí fue,
por quien llegué a mi meta fija.

Si te cuentan que traspasé,
las fronteras de mi mente,
que llegué a donde nunca imaginé,
gracias a tí lo logré.

Todo lo bueno que hay en mí,
es todo gracias a tí.
Eres la raíz de mi existencia,
por tí vivo, por tí pienso, por tí escribo,
por tí veo más allá de las apariencias.

Todo me has dado, tan poco te he demostrado,
con mis palabras he intentado,
desde Octubre hasta Septiembre,
demostrarte lo que tú me has inspirado.
Y dejar grabado para siempre,
algo duradero y resistente.
Como flores de papel,
laboriosas de hacer,
delicadas, bonitas,
y duraderas de por vida.

Buscaré una noticia donde digan que estaré,
a tu lado en lo bueno, y en lo malo también.
No respetes a los que piensan que tú no lo mereces,
pues ellos se lo pierden, y yo gano con creces.
A la mierda los demás, los que no te saben valorar.
Viva la nueva vida, viva la libertad.
Sueña, piensa, escribe, siente, todo, vive.
Porque el futuro Dios sabrá,
pero el presente aquí está.
Con tu fuerza, valentía,
tu coraje, tu valía.
Vive y sé feliz,
que si quieres, lo bueno ya está aquí.

Expresar, sin temor, cada día el amor.
Y demostrar la verdad, no solo en las fiestas.
Porque quererte te quiero cada día,
porque mi madre lo has sido toda mi vida.
Porque te quiero hoy, y ayer,
y mañana, y pasado,
con los ojos cerrados.
Seré tu fuerza, si la necesitas.
Seré tu agua si tienes sed.

Solo tú haces que un beso en la frente a todos lo males aullente.

Te quiero más de lo que jamás podré expresar.

¡ Muchas felicidades mamá!

BIENVENIDO A MI LISTA DEL PASADO

Recuerdo el día en que te dí mi mano
y la rechazaste.
Recuerdo el día en que tus ojos
me dijeron no.
Crueles eran tus palabras,
y débil fue mi corazón.
Un silencio que se hizo eterno,
que estre mis recuerdos fue un adiós.

Lloré por tí, sufrí por tí,
entre huecos de papel dormí.
Risas dormidas,
en los ojos ya perdidas.
Reproches ocultados,
un rencor jamás pensado.
Agua limpia convertida,
en tan solo sucias mentiras.

No te olvido,
no por nada,
es que me abandonó un buen amigo.

Tú perdiste, yo lo hice,
algo te avanzaré, soy feliz de no verte.
Cambiar no es malo,
pero abandonar es un gran palo.
No te escribo con nostalgia,
ni tampoco con rencor,
solo he recordado viejos tiempos,
y ahora sé que el presente es mejor.

Solo quiero decirte adiós,
una despedida un poco tarde,
pero al menos lo ha hecho uno de los dos.

Nunca olvidaré los buenos momentos,
las sonrisas sin secretos.
Los lazos que nos unían,
las horas compartidas.

Adiós amigo, adiós.
Adiós a tí, y a tí adiós.

Los que un día fueron y jamás serán.
Feliz vida, feliz libertad.

Hay cosas que no se pueden expresar, que no se pueden medir.
Hay veces en las que es mejor no hablar, en las que las palabras sobran.
Hay momentos mágicos, especiales e inolvidables,
que simplemente son maravillosos por sí mismos,
que no necesitan ningún adjetivo, ni nada añadido,
que no necesitan mejora porque no se pueden mejorar.
Momentos inexplicables, momentos especiales.
Sencillos, con muchos detalles,
coloridos, aunque ni distingas las calles.
En la sencillez está el encanto, o al menos eso dicen.