martes, 26 de enero de 2010

SE MURIÓ EL MUNDO, Y NADIE SE DIÓ CUENTA

Los silencios de la cueva
en que habitaba con los duelos,
suspirando entre palabras
que acarician simples versos.

Hoy lo vivo,
hoy lo muero,
hoy me río,
sueño y veo.

Porque los miedos que aquí habitan
que revuelven mis entrañas,
no convencen ni palpitan
allá donde lo encontraran.

¿Hay respuesta a mis llamadas?
¿Hay consuelo ante el espanto?
Vinieron fuerte, con encanto,
cayeron cerca de alambradas.

Las espinas ya rasgaron,
dañando acero ya sangrando.

No rellenaron los huecos de sombra,
se acabaron los tiempos de roca,
se olvidó la verdad justiciera,
ya no queda lo bueno en la Tierra.

lunes, 18 de enero de 2010

PREMIO PRINCESS

Hace unos días, me concedieron este premio:




No sé yo si precisamente tengo algo de princess, pero, por lo visto, alguien cree que sí. Y, sinceramente, me siento halagada, veo que mi otro blog (en el que de princesa no tengo nada) no ha hecho demasiados estragos en la imagen que puedan percibir los demás sobre mí.
Y, como suele ser habitual en los premios en cadena, tengo que “cumplir” ciertos requisitos, cosa que, os permitirá conocerme un poco más, puesto que, aunque en este blog, escribo más de mí (aunque, lógicamente, no todo va sobre mí, ni sobre nadie en concreto), es de una forma un poco distinta a decir las cosas directamente, asique, vamos al lío.

Al recogerlo tengo que:

1. Dar las gracias a quien me lo ha otorgado: muchas gracias a lavidasincolor, este es el primer premio que recibo en, este, mi primer blog, y me hace mucha ilusión.

2. Nombrar a un autor que me encante: Uf, solo uno… Carlos Ruíz Zafón es muy buen escritor.

3. Nombrar un autor que destaque: Bueno, supongo que al mismo, aunque también Stephenie Meyer, y… mejor lo dejo que no paro ( je je).


4. Un libro que me encante: ¿Solo uno? Ah, claro, que vosotros no sabéis que soy conocida, entre otros, por la “bebe-libros”. Libro que pillo, libro que absorbo.
Todos los que he leido, a su manera, me han encantado.


5. ¿Qué me emociona siempre? Muchas cosas. Tal vez no las que otros piensen. En plan bien… sería muy largo de explicar. En plan mal, resumiendo, el dolor que pueda sufrir un ser querido.

6. Algo que odie: Uy… ja ja. Si queréis os pasáis a Alas de “libertad”, y acabamos antes XD.
Bueno, lo que he dicho antes de ver sufrir a mi gente (o, a veces, sin ser nada mío también), a parte de dolerme y, por tanto, emocionarme, lo odio, lógicamente; odio el hecho de que estén así, y la razón que les ha hecho llegar a eso.

7. Pasarlo a seis blogs:

martes, 12 de enero de 2010

INDIFERENCIA

Indiferencia, ante la verdad.
Indiferencia, por no querer mirar.
Indiferencia, por dejar escapar lo obvio.
Indiferencia, por no respetar a unos y otros.
Eso es lo que hay, eso es lo que ofrecen,
esa es su mejor baza, es la ley de los más fuertes.
Ignorar, no liar.
Respetar, en mi opinión, más primordial.
Mis venas se secan a través de mis ojos,
que gastan lo que frunce mis entrañas.
Un lamento, un grito,
un error, infinito.
Ciegos a propósito,
sordos y con odio.
¿No véis?
¿No queréis?
¿Qué os pasa?
¿Ya solo os importa vuestra gracia?
Decepción es decir poco,
pues no entiendo qué tripa se os ha roto.
Pero tranquilos, el arrepentimiento llegará,
lo peor de todo es que será al final.

martes, 5 de enero de 2010

LA CARTA

Queridos Reyes Magos:

Este año no os voy a pedir ningún regalo,
este año no pediré ni lo necesario,
este año no rogaré ningún milagro.

Pues lo que más ansío en este mundo jamás lo tendré.
Pues mis palabras y llantos no obtendrán consuelo.

Ya no creo en la magia ni los cuentos de hadas.
Se me agotan las esperanzas, ya no vivo por el mañana.

Este año, solo os pediré una respuesta.

Solo quiero una respuesta a mi pregunta: ¿por qué?

¿Por qué el mundo es tan cruel?

¿Por qué la vida es tan difícil?

¿Por qué las personas nos dañamos unas a otras?

¿Por qué el sufrimiento y el dolor intenso es el pan de cada día para la mayoría?

¿Por qué debemos tener fe?

¿Por qué desvivirse, llorar lágrimas de sangre, para qué?

¿Por qué, al final, todos somos prescindibles?

¿Por qué ganan los viles?

¿Por qué todos miran hacia otro lado?
¿Por qué no se enfrentan a lo que no es de su agrado?


¿Por qué nadie piensa como yo?

¿Por qué, como estas dudas, tengo un millón?

¿Por qué somos tan cobardes?
¿Por qué el miedo nos invade?

¿Por qué estas palabras no sirven para nada?
¿Por qué, como siempre, solo le importarán a mi almohada?

¿Por qué?


No quiero lazos, no quiero adornos, solo necesito una respuesta.